Este sábado 28 de agosto el Trail Valle de Tena ha alzado el telón de su sexta edición con la celebración de sus dos pruebas más emblemáticas: la 8K, con 77 km y 6.750 m positivos, y la 4K, de 43 km y 3.600 m positivos.
Tras un 2020 de parón obligado por la pandemia y bajo un estricto protocolo anticovid-19, Panticosa (Huesca) ha vuelto a convertirse en el epicentro del trail running español y el icónico Garmo Negro, a más de 3.000 m de altitud, en el vigilante de un espectáculo montañero inmenso.
En ese escenario privilegiado, alrededor de 500 corredores de montaña se han enfrentado a dos de los recorridos más duros y bellos del Pirineo aragonés pero, aún más importante, a una experiencia inolvidable que les ha llevado a empujar con sus propios límites físicos y mentales.
Y si hablamos de competición, este año ha habido a raudales con unas carreras muy competidas y un nivel atlético espectacular, a pesar de las altas temperaturas que hicieron aún más exigente la contienda.
Se sabía que los resultados iban a ser tomados en cuenta para la formación de la selección española FEDME, por lo que algunos de los mejores especialistas nacionales se citaron en la 8K y la 4K para presentar sus credenciales. Fueron Jonathan Tejada y Marta Vidal, en la primera, y Zaid Ait Malek y Ana Alonso, en la segunda, quienes se apuntaron la victoria.
Jonathan Tejada y Marta Vidal, los más duros en la 8K
A las 5:00 horas salió la prueba reina, con 179 corredores desde la plaza de la Iglesia y todos ellos con la mascarilla puesto hasta salir fuera del pueblo. Las miradas evidenciaban los nervios, la concentración y la ilusión por un desafío para el que se necesitan años de preparación. Ibones de Brazatos, Balneario de Panticosa, el propio Garmo Negro, los ibones Azules, el refugio de Respomuso, la vuelta a Foratata… Muchos lugares emblemáticos para recorrer en tan solo unas horas.
Fue el gallego Sergio Pensado el primero en pasar por el Balneario (km 25,6), seguido de cerca por dos corredores que conocen muy este trazado: el oscense Óscar Puyuelo y el vigente vencedor, el riojano Jonatan Tejada. Entre los tres se dibujaba la pugna, con las figuras de Iker Karrera y Óscar Pérez pisándoles los talones.
Volviendo a la carrera, en la espectacular subida al Garmo Negro (km 31), con 1.400 m positivos en apenas 5 km, Tejada impuso su ley. A paso ligero a pesar de la pendiente, fue alcanzando y abriendo hueco con sus rivales. Esos 5 minutos de margen en los 3.061 m de la cumbre parecían exiguos para aguantar durante los 45 km que tenían por delante, pero se aferró a ellos e incluso logró ampliarlos a 10 en el descenso al embalse de La Sarra (km 56).
Si entre los chicos, tres corredores habían protagonizado la primera mitad del recorrido; entre las chicas, Sandra Sevillano y Marta Vidal dibujaban un duelo con el cuchillo en la boca. La vasca había dominado el primer bucle por Brazatos, pero la aragonesa le dio la vuelta, una vez más, en la subida al Garmo. Lo que en un principio eran una pequeña brecha de 6 minutos se convirtió en más de 1 hora en el collado de Musales (km 50).
En ese punto de la carrera no estaba todo dicho, ni para ellos ni para ellas, pero los líderes supieron jugar sus cartas haciendo gala de una fortaleza pasmosa. Jonatan cruzó la meta en 13 horas, 24 minutos y 14 segundos, consiguiendo su segundo triunfo consecutivo en Panticosa. “Terminar una carrera sin lesiones siempre es motivo para estar orgulloso y contento. Solo espero que el tremendo calor que ha hecho permita al resto de corredores llegar hasta aquí”, expresó al terminar, visiblemente emocionado.
16 minutos después llegó el segundo clasificado, Óscar Puyuelo (13h41’01”), luciendo su habitual sonrisa que no escondía, sin embargo, las grandes dosis de sufrimiento vividas. El de Huesca se proclamó además campeón de Aragón de Ultras por la Federación Aragonesa de Montaña. Y otros 16 minutos más tardó Iker Karrera (13h57’21”), que ocupó el tercer lugar en una carrera en la que fue de menos a más y acabó sacando su gen más competitivo para subir al podio. Tras ellos llegaron Sergio Pensado, Rubén López y Óscar Pérez, creador del Trail Valle de Tena.
En la carrera femenina, llegaba la primera gran baja, la de Sandra Sevillano que se retiró en el embalse de La Sarra (km 56), tras sufrir problemas estomacales. Desde atrás empujaba la asturiana Claudia Gutiérrez, aunque su distancia con Marta Vidal parecía ya insalvable. Y lo era, pero la veterana corredora aragonesa le puso un poco de emoción al sufrir dos pérdidas consecutivas en las inmediaciones de Sallent (km 67), a unos 10 km para la llegada.
Finalmente, la sangre no llegó al río y la de Sabiñánigo pudo rubricar su triunfo con un crono de 15 horas, 25 minutos y 11 segundos. “Ha sido un día duro, con mucho calor, en el que he sufrido mucho, pero en el que también he disfrutado de correr en mi casa. Quiero agradecerle a la organización y a los voluntarios su trabajo, y sobre todo a mi compañero que siempre está al pie del cañón”, apuntaba ante la mirada del público. Se proclamaba, además, la campeona de Aragón de Ultras.
Con 33 minutos de diferencia llegó a la meta Claudia Gutiérrez (15h57’12”), componente del OS2O Trail Team, mientras que la tercera clasificada, aunque mucho más alejada, fue Carla Junquera (17h41’59”).
Iker Karrera, valores de montaña
El legendario corredor vasco, que regresaba a la competición tres años después, fue uno de los protagonistas de un bonito momento de compañerismo. Compartiendo kilómetros con Alfonso Cano, vio cómo a este se le rompían sus zapatillas en plena faena y en el siguiente avituallamiento, no dudó en cederle las zapatillas que tenía allí preparadas para él. No eran exactamente la talla de Alfonso, pero los dos podrían continuar su carrera demostrando que en el Trail Valle de Tena los valores de la montaña siguen más vivos que nunca.
Zaid Ait Malek y Ana Alonso dominan la 4K
Tomando la segunda parte de la 8K, concretamente partiendo desde el Balneario, arrancó a las 8:00 horas la 4K, uno de los maratones de montaña más duros de España. En esta ocasión eran 312 los valientes, que también partieron con la mascarilla puesta hasta que se abrió la distancia de seguridad entre ellos.
La subida al Garmo Negro fue muy rápida, con Zaid Ait Malek y Fran Naval parando el cronómetro en la cima en un espectacular tiempo de 1h17’. Raul Criado y Xabier Zarranz coronaban apenas dos minutos después. A partir de ahí, la lucha por el liderato fue un toma y daca entre Zaid y Raúl, con las subidas a favor del primero y las bajadas del segundo, pero fue el corredor de origen quien llegó más entero al final, haciéndose con la victoria en 5 horas, 53 minutos y 12 segundos.
“Me he bañado en todos los sitios que he encontrado”, reía el corredor añadiendo que “he intentado no arriesgar demasiado en las bajadas para evitar cualquier lesión”. Y es que a sus 37 años, Zaid quiere volver a ser convocado por la selección española el próximo mes de noviembre.
La pelea por el resto de cajones del podio masculino fue apoteósica, con tres corredores entrando en meta en 15 segundos. Raúl Criado (6h05’15”), que llegó completamente exhausto, se quedó con el segundo puesto, mientras que Fran Naval (6h05’24”) hizo lo propio con el tercero, después de que Xabier Zarranz decidiera no esprintar en la última recta.
Entre las chicas fue Ana Alonso la que no encontró rival. La andaluza, que en invierno forma parte de la selección española de Esquí de Montaña, dominó la carrera desde el primer punto de control y finalmente se hizo con la victoria en 7 horas, 42 minutos y 59 segundos.
“Venía sin ninguna expectativa de ganar, pero me he ido encontrando bien y he podido llegar la primera en el que es mi segunda maratón de montaña”, reconocía la joven deportista. Tras ella, Noelia Lardiés (8h46’40”) y Aida Campos (8h47’57”) se adjudicaron la segunda y tercera posición.