Muchas cosas se han dicho ya de un carrerón de montaña como es la 8K. Un recorrido de 77 km y 6.800 m positivos por alta montaña, terreno técnico, continuas y pronunciadas pendientes, con el factor de la altitud y, sobre todo con un ambiente de 10.
Por mi parte, la he corrido en dos ocasiones. La primera en 2018, fue Campeonato de España de Ultras y había un nivel altísimos de corredores! Yo la pude acabar en 19h21. Al año siguiente decidí volver, ya que la carrera, su recorrido y todo el Valle de Tena me enamoraron y la suerte fue muy distinta: Pude mejorar mi tiempo y ganar la carrera bajando de las 17h. ¡Fue muy especial para mí y además la disfruté en todo momento!
Basándome en esas experiencias -y también en muchas otras ultras y entrenamientos por este tipo de terrenos, os voy a dar algunos consejos para vuestra preparación para la 8K.
El primero no puede ser otro que reconocer el terreno. Es algo fundamental en todo tipo de carreras, pero si no conoces lo que significa la alta montaña pirenaica, ¡es imprescindible! Hay zonas de todo tipo, algunas rodadoras, pero muchas otras muy técnicas. Incluso collados de altura un poco expuestos con alguna cuerda para ayudarnos. Por ello, lo ideal es conocer todo lo posible con anterioridad, realizando algunas salidas previas. Si no puedes visitar el Valle de Tena antes de la carrera, te recomiendo que investigues con vídeos y fotos, y busques zonas similares para entrenar más cerca de tu casa.
El segundo es estudiar bien el perfil. Para afrontar una prueba tan larga (en kilómetros, pero sobre todo en tiempo), es tan importante el físico como la cabeza, y para prepararnos debemos identificar dónde van a estar nuestras mayores dificultades. Es muy conocida la subida al Garmo Negro (3.064 m), en la que te metes 1.500 m+ en menos de 5 km, pero no es la única. Estúdiatelo bien, establece objetivos intermedios y guarda fuerzas para el final. El entrenamiento debe estar adaptado a lo que os vais a encontrar en carrera.
Sobra decir que el día de carrera no puede fallar nada y menos el material. Por ello, hay que probar durante los entrenos lo que vayamos a llevar tanto de ropa, como de calzado, chalecos, mochilas… Tener la seguridad de que ese día vas a estar concentrado en terminar la carrera y no en los posibles “roces nuevos” o en alguna incomodidad.
Pasa lo mismo con la comida y la bebida. Veo muy importante probar en los entrenos toda la comida que vas a necesitar en carrera y saber que, si no hay imprevistos, todo te va a sentar bien y te va a gustar. En este sentido, la carrera facilitará con anterioridad de lo que va a constar cada avituallamiento y así podéis calcular qué es lo que tendréis que llevar encima.
Por último, la base de todo esto y el camino que vamos construyendo para poder llegar a meta: el entrenamiento. Personalmente pienso que para poder hacer una carrera como esta, es muy importante ser constante en el día a día. A mí lo que más me gusta es acumular muchas horas de varias actividades diferentes tanto de alpinismo, bicicleta, escalada, correr…. Acumular mucho desnivel y ser consciente de que los días de descanso son lo básico para no llegar a la carrera con un sobre entrenamiento o para evitar lo máximo posible las lesiones. Asesorarse con un entrenador o que nos planifiquen puede ser una buena opción si vemos que podemos pasarnos o si no sabemos cómo gestionar los entrenos.
Lurdes Palao
Corredora del OS2O Team